Los beneficios del patinaje en pista hielo sintético o natural

Patinar sobre hielo es divertido y encanta a los niños. Pero, además, se trata de una actividad que puede resultar muy beneficiosa para los más pequeños.

Te contamos por qué:

El patinaje sobre hielo (ya sea en pista hielo sintético o natural) es una actividad divertida, muy entretenida y perfecta para disfrutar en familia. Por eso, a los niños les encanta. Pero, además, puede resultar muy beneficiosas para los más pequeños, ya que no deja de ser un ejercicio físico y, como tal, tiene muchas ventajas. Éstas son algunas de ellas:

– Mejora el equilibrio y la resistencia:

El patinaje es perfecto para mejorar el equilibrio. Al tener que sostenerse sobre  patines con una base estrecha (una hoja de metal) los niños mejoran su equilibrio y su resistencia sin darse cuenta.

– Fortalece las piernas y los glúteos:

La práctica de patinaje sobre hielo ayuda a fortalecer las piernas de forma natural, especialmente los músculos del cuadro inferior, que son los que más se utilizan en el patinaje. Asimismo, es una actividad perfecta para tonificar los glúteos, la cintura y el abdomen. Es, por lo tanto, una actividad idónea para niños con sobrepeso o con tendencia a acumular algunos kilos en esta zona.

– Ayuda a mejorar la postura:  

La posición correcta al patinar es la que se consigue manteniendo la espalda recta, los hombros bajos y el abdomen contraído. Por eso, gracias a este ejercicio los niños pueden mejorar su postura.

– Ayuda a combatir el sobrepeso y la obesidad:

El sobrepeso y la obesidad infantil están considerados dos de los principales problemas de salud pública del siglo XXI. Para combatirlos, los médicos recomiendan llevar una dieta saludable y la práctica habitual de ejercicio físico. El patinaje sobre hielo es un ejercicio aeróbico y, por lo tanto, ayuda a quemar calorías y a mantener una buena forma física. Se calcula que durante media hora continuada de patinaje se pueden llegar a quemar unas 285-300 calorías de media (la cifra exacta dependerá de cada persona y de cada caso en concreto).

– Ayuda a relajarse:

La práctica de deporte ayuda a liberar tensiones y a eliminar el estrés, ya que supone un aumento de la producción de endorfinas (una hormona que nos hace sentirnos mejor y estar más felices). Por eso, es bueno que los niños realicen alguna actividad deportiva después de las clases, los idiomas, los refuerzos y las actividades extraescolares. Patinar sobre hielo es perfecto para que consigan los beneficios del deporte sin tener la sensación de estar realizando gimnástica. Además, es una actividad perfecta para realizar al salir de clase o durante las vacaciones escolares.

– Ideal para dormir mejor:

A menudo, a los niños les cuesta dormir o se desvelan por la noche. La práctica de ejercicio es una buena medida para evitar el insomnio infantil. Los pequeños estarán más cansados después de pasar una tarde patinando en la pista de hielo y caerán rendidos en la cama para no despertarse hasta la mañana siguiente.

– Una actividad para socializar y hacer nuevos amigos:

Muchos ayuntamientos o centros comerciales recurren al alquiler pista de hielo como una forma de crear ambiente en los centros de las ciudades y de conseguir que sus habitantes socialicen entre ellos. El patinaje sobre hielo es, por lo tanto, una buena excusa para que nuestros pequeños conozcan a otros niños, socialicen con personas de su edad y hagan nuevos amigos de forma natural y sin apenas darse cuenta. Todo ello en un ambiente divertido y festivo.

– Una forma divertida de pasar tiempo en familia:

Otra de las ventajas del patinaje sobre hielo es que se trata de una forma divertida de pasar tiempo en familia. Ir a patinar con los padres y los hermanos es para los niños una actividad diferente y entretenida, beneficiosa también a nivel emocional para los más pequeños.

Como ves, el patinaje sobre hielo es mucho más que una forma divertida de pasar una tarde. Puede ser la excusa perfecta para que nuestros hijos realicen algo de deporte y se beneficien de todas las ventajas de la práctica de actividad física. Sin olvidar que les ayuda a mejorar su postura y su musculatura.

Además, es una ocasión idónea para que los más pequeños socialicen, entablen conversación con personas de su edad y hagan amigos. Consulta los espacios de tu ciudad donde se instalen pistas de hielo y ponte los patines porque, como ves, esta actividad tiene muchas ventajas.